Yo soy yo y mis circunstancias.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Agudo frío y viejos ruidos del desdén
resuenan en el callejón del anti- bar
aquél donde nos dejábamos volar
y nos perdíamos en el Edén.

¿Dónde está el corredor de apuestas?
Hoy quiero poner sobre el tablero
un corazón , quizás salvaje sonajero
para librar al dolor en una noche de estas.

Ya no suena aquel canalla de Sabina
ya no nos miramos con la pasión
ni aquella absurda diversión
de cuando despertábamos con las salinas.


Y ahora solo queda esperar a que vengan
y recojan lo poco de decencia de mi
que se acongoja sin saber que no estás aquí
sintiéndome simplemente, ciega.

N.Ledo.